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Domingo De La Resurrección De Jesús: Centro En Línea

April 12, 2020 Pastor: Juan Ortega Series: Centro Online

Topic: Sermons Scripture: 1 Corinthians 15:1–8

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DOMINGO DE LA RESURRECCIÓN DE JESÚS 2020
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Daré lectura de 1 Corintios 15:
Ahora, amados hermanos, permítanme recordarles la Buena Noticia que ya les prediqué. En ese entonces, la recibieron con gusto y todavía permanecen firmes en ella. Esa es la Buena Noticia que los salva si ustedes siguen creyendo el mensaje que les prediqué, a menos que hayan creído algo que desde un principio nunca fue cierto.
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Yo les transmití a ustedes lo más importante y lo que se me había transmitido a mí también. Cristo murió por nuestros pecados tal como dicen las Escrituras. Fue enterrado y al tercer día fue levantado de los muertos, tal como dicen las Escrituras.
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 Lo vio Pedro  y luego lo vieron los Doce. Más tarde, lo vieron más de quinientos de sus seguidores a la vez, la mayoría de los cuales todavía viven, aunque algunos ya han muerto. Luego lo vio Santiago, y después lo vieron todos los apóstoles. Por último, como si hubiera nacido en un tiempo que no me correspondía, también lo vi yo.
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12 Pero díganme lo siguiente: dado que nosotros predicamos que Cristo se levantó de los muertos, ¿por qué algunos de ustedes dicen que no habrá resurrección de los muertos? 13 Pues, si no hay resurrección de los muertos, entonces Cristo tampoco ha resucitado; 14 y si Cristo no ha resucitado, entonces toda nuestra predicación es inútil, y la fe de ustedes también es inútil.
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 15 Y nosotros, los apóstoles, estaríamos todos mintiendo acerca de Dios, porque hemos dicho que Dios levantó a Cristo de la tumba… 17 y si Cristo no ha resucitado, entonces la fe de ustedes es inútil, y todavía son culpables de sus pecados18 En ese caso, ¡todos los que murieron creyendo en Cristo están perdidos!
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 19Y si nuestra esperanza en Cristo es solo para esta vida, somos los más dignos de lástima de todo el mundo.
20 Lo cierto es que Cristo sí resucitó de los muertos. Él es el primer fruto de una gran cosecha, el primero de todos los que murieron.
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21 Así que, ya ven, tal como la muerte entró en el mundo por medio de un hombre, ahora la resurrección de los muertos ha comenzado por medio de otro hombre. 22 Así como todos mueren porque todos pertenecemos a Adán, todos los que pertenecen a Cristo recibirán vida nueva;
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 23 pero esta resurrección tiene un orden: Cristo fue resucitado como el primero de la cosecha, luego todos los que pertenecen a Cristo serán resucitados cuando él regrese.
24 Después de eso, vendrá el fin, cuando él le entregará el reino a Dios el Padre, luego de destruir a todo gobernante y poder y toda autoridad.

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 25 Pues Cristo tiene que reinar hasta que humille a todos sus enemigos debajo de sus pies. 26 Y el último enemigo que será destruido es la muerte.

El apóstol Pablo, hablando bajo la inspiración de Dios, claramente nos da a entender que…

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El cristianismo, o permanece o desvanece, sobre la credibilidad de la resurrección de Jesús.

Cristo hizo declaraciones asombrosas acerca de sí mismo.

…tan asombrosas, que si no hubiera resucitado de entre los muertos, tendríamos que llamarle un lunático o un demonio. El hecho es que    Todo lo que Cristo enseñó, prometió y especialmente dijo y reclamó acerca de sí mismo hubiera quedado en el olvido si Él no hubiera resucitado.  Lee los evangelios—los primeros cuatro libros del Nuevo Testamento y verás que

Cristo hizo unas declaraciones asombrosas acerca de sí mismo.

  • Reclamó ser “igual a Dios” y ser Dios en cuerpo humano. “¡Los que me han visto a mí han visto al Padre!” (Juan 14:9).
  • Reclamó tener la autoridad de perdonar pecados,  y repetida y públicamente lo hizo (Lucas 5:17-27; 7:48).
  • Reclamó tener el poder para un día resucitar todos los muertos.  “todos los que están en las tumbas oirán la voz del Hijo de Dios 29 y resucitarán. Los que hicieron el bien resucitarán para gozar de la vida eterna, y los que continuaron en su maldad resucitarán para sufrir el juicio” (Juan 5:28-29). 
  • Además, reclamó tener el poder para resucitarse a sí mismo. Acercándose al final de su ministerio terrenal dijo:  Nadie puede quitarme la vida sino que yo la entrego voluntariamente en sacrificio. Pues tengo la autoridad para entregarla cuando quiera y también para volver a tomarla. Esto es lo que ordenó mi Padre” (Juan 10:18; 2:17-22).
  • Además, repetidamente aceptó ser adorado por sus discípulos (Matthew 14:32-33; 28:8-10; John 9:35-38; 20:28).

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La veracidad de todo lo que dijo, hizo y prometió que haría está vinculado a su identidad
. “ “…Jesucristo nuestro Señor, quien nació como niño en el seno de la familia del rey David, y al resucitar de entre los muertos probó ser el todopoderoso Hijo de Dios y poseedor de la naturaleza santa de Dios mismo”—Romanos 1:2-4 (La Biblia al día).

Dijo un erudito: “Sin la resurrección de Cristo la fe cristiana—el cristianismo—jamás llegaría a existir. Jesús hubiera llegado ser simplemente la nota a pie de página—y tal vez ni eso. Los discípulos hubieran permanecido destrozados y derrotados y su cuerpo en una tumba hubiera silenciado su esperanza que él era el Mesías. [sin la resurrección de Jesús] la cruz hubiera seguido siendo un triste y vergonzoso fin a su carrera. El origin del cristianismo depende y gira sobre el hecho que Jesús resucitó de los muertos”.

El hecho es que la resurrección es lo que distingue el cristianismo de todas las demás religiones

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Asi que, ¿QUÉ SIGNFICA PARA NOSOTROS HOY
EL HECHO DE QUE JESÚS RESUCITÓ DE LOS MUERTOS?
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1. La esperanza de la SALVACIÓN PERSONAL
mediante llegar a conocer al Cristo viviente.

[El cristianismo ofrece una salvación seguro mediante el llegar a conocer a Cristo viviente personalmente. Pablo lo dijo así: Si declaras abiertamente que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de los muertos, serás salvo”—Romanos 10:9 (NTV). Observa que no dice, “Jesús fue…” sino que “Jesús es el Señor…y “que Dios lo levantó de los muertos, serás salvo.”

La vida cristiana—el ser cristiano—consiste en tener a Cristo EN TU VIDA. La Palabra de Dios dice…
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El que tiene al Hijo tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida” 1 Juan 5:12-14. El evangelio reclama algo que ninguna otra religión reclama. Islam jamas ha dicho, “el tiene que tiene Mahoma tiene vida eterna”. El Budhismo jamás ha dicho, “el que tiene a Buda, tiene vida y perdón”. En cambio, la Sagrada Escritura declara: “recuerden que los que no tienen al Espíritu de Cristo en ellos, de ninguna manera pertenecen a él” (Romanos 8:9).

Tal vez has escuchado a los cristianos decir, “el cristianismo es una “religión” sino una “relación” con el Cristo viviente mediante la fe. El ser cristiano consiste en mucho más que meramente conocer las doctrinas y credos de la iglesia sino en tener el Espíritu de Cristo.  “Ya no vivo yo, más VIVE CRISTO EN MI” (Gál. 2:20).

El Cristo viviente hace posible La esperanza de la SALVACIÓN PERSONAL ¿No querrás invitar a Cristo a venir y entrar en tu vida?

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2.
en segundo lugar, La PRESENCIA DEL CRISTO VIVIENTE NOS PODER
para enfrentar las dificultades de la vida.

La última promesa que Cristo dio a Sus discípulos fue: “…tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos” –Mateo 28:20 NTV.

El apóstol Pablo dijo, “Todo lo puedo hacer (¿cómo?) por medio de Cristo,  quien me da las fuerzas” (Filipenses 4:13).

Cuando Cristo está en tu vida, todo es posible. Su PRESENCIA es lo que hace la diferencia y transformación de tu vida. 

Uno de los más fascinantes sucesos de la historia de la resurrección, y que sirve como evidencia de la resurrección de Jesús, fue el cambio repentino y radical que ocurrió en las vidas de los discípulos del Señor cuando experimentaron Su presencia. Un momento están derrotados, en otro están llenos de dinamismo. Por tres días están escondidos, acobardados y llenos de miedo de que ellos sufrirían la misma suerte de Jesús. Se les había escurrido toda su fe.  Luego, de un momento al otro los vemos llenos de fe y confianza y el valor para enfrentar sus enemigo y aun sufrir una muerte dolorosa, 

¿A qué se debe el cambio tan radical en sus vidas? ¡La presencia del Cristo viviente que trae consigo su poder vivificador!

(17) Los discípulos no esperaban que Cristo resucitaría de la muerte.
Nadie dijo, “Nuestro Maestro dijo que resucitaría después de estar en la tumba tres días. Madruguemos Y Vayamos a ver si acaso sucede.” No. Al contrario, cuando María Magdalena lo vivió vivo y regresó y dar la buena noticia a los discípulos, Lucas dice, “el relato les pareció una tontería, y no les creyeron” (Lucas 24:10-11).

En otra ocasión Jesús se les apareció y les preguntó 38 «¿Por qué están asustados... ¿Por qué tienen el corazón lleno de dudas? 39 Miren mis manos. Miren mis pies. Pueden ver que de veras soy yo. Tóquenme y asegúrense de que no soy un fantasma, pues los fantasmas no tienen cuerpo, como ven que yo tengo».

 40 Mientras hablaba, él les mostró sus manos y sus pies. 41 Aun así, ellos seguían sin creer, llenos de alegría y asombro” (Lucas 24:38-41).

Ellos no inventaron la historia de la resurrección de Jesús, ellos experimentaron la realidad de la PRESENCIA del Cristo viviente que trae el poder de cambiar la vida, desde adentro para afuera y enfrentar todos los obstáculos con la actitud de que “TODO LO PUEDO por medio de Cristo,  quien me da las fuerzas” (Filipenses 4:13)

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3. En tercer lugar, La iglesia jamás llegaría a existir si no fuera por LA PRESENCIA PODEROSA DEL CRISTO VIVIENTE.

Por los primeros 3 siglos de la vida de la iglesia la más poderosa fuerza política y militar del mundo de esa época trató de destruirla. Concentró toda su furia en contra la iglesia pero no pudieron impedir su marcha a través del imperio romano.  Las autoridades romanas usaron las más viles, feroz y salvajes métodos de persecución en contra los cristianos. El imperador  Nerón los mandaba cubrir con brea, ser colgados de postes y ser encendidos para alumbrar su jardín. Los ponían en costales llenos de serpientes. Fueron echados a los leones y fieras. Fueron hervidos en aceite, quemados vivos, crucificados cabizbajo. A pesar de tales sufrimientos brutales, permanecían resueltos y constantes en su fe en Cristo. Además, se reporta que cantaban y alababan a Cristo al entrar en los estadios donde serían despedazados leones o otras fieras.

Tertuliano, un destacado líder de la iglesia, le dijo al imperador romano en tono desafiante: “todas tus crueldades ingeniosas nada han logrado…más tratas de destruirnos, más crece nuestros números…la sangre de los cristianos es la simiente de la iglesia…nuestra historia es corta, sin embargo ahora hemos llenado tus ciudades, islas, campos, palacio, senado y tu foro; solo te hemos dejado tus templos vacíos”.

El el año 303 la iglesia sufrió una de las más intensas persecuciones bajo el imperador Diocleciano. Convencido que logaría destruir la iglesia, mandó hacer una moneda con las palabras, “Diocleciano, el imperador que destruyó el nombre de Cristo”. Pero 10 años después llegó al trono Constantino, que se convirtió al cristianismo. Y como ironía divina, la gran piedra que cubrió la tumba de Diocleciano es la piedra angular para un Iglesia cristiana que existe hasta el día de hoy en cumplimiento las palabra de Cristo: “… edificaré mi iglesia, y el poder de la muerte no la conquistará”—Mateo 16:18.

 ¿Cómo pudieron miles y miles de cristianos mantener su fe? Solo mediante la PRESENCIA del Cristo viviente que nos da la fuerza.

En tercer lugar…
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4. LA INTERCESIÓN DEL CRISTO VIVIENTE
GARANTIZA NUESTRA SALVACIÓN
…nos mantiene salvos.

Cristo terminante y  inequívocamente declaró que un verdadero creyente jamás podrá perderse, es decir, caer otra vez bajo la condenación. 27 Mis ovejas oyen mi voz; yo las conozco y ellas me siguen. 28 Yo les doy vida eterna, y nunca perecerán, ni nadie podrá arrebatármelas de la mano.29 Mi Padre, que me las ha dado, es más grande que todos; y de la mano del Padre nadie las puede arrebatar”—Juan 10:27-29 (NVI).

La promesa de una salvación segura y permanente hubiera sida vana si Cristo no hubiera permanecido muerto.

El apóstol Pablo, en su carta a los Romanos capítulo 8, nos explica el porque es imposible que un verdadero creyente jamás caerá otro vez bajo la condenación. El hace una serie de preguntas retóricas—cuya respuesta es obviamente positivas. Me enfocaré Solo en una de esas preguntas:

 33¿Quién se atreve a acusarnos a nosotros, a quienes Dios ha elegido para sí? Nadie, porque Dios mismo nos puso en la relación correcta con él. 
34 Entonces, ¿quién nos condenará? Nadie,
(fíjate que Pablo señala a dos hechos históricos) (primeramente) porque  Cristo Jesús murió por nosotros y resucitó por nosotros, (Luego señala un hecho presente) y está sentado en el lugar de honor, a la derecha de Dios, e intercede por nosotros”—Romanos 8:31-34.

Dos realidades espirituales que sirven como el fundamento inmovible y perdurable de la salvación:
1.  Cristo murió por nuestros pecados. Pero su muerte de nada serviría si Jesús  no hubiera resucitado. Como leímos al principio: 17Y si Cristo no ha resucitado, la fe de ustedes es ilusoria y todavía están en sus pecados”(1 Corintios 15:17).  Pero resucitó como prueba de que Dios Padre aceptó su sacrificio como el suficiente pago por los pecados de toda la humanidad.

  1. Pero la segunda cosa que Dios provee para asegurar que nuestra relación con Dios sea permanente…es LA presente INTERCESIÓN DE CRISTO, la abogacía de Cristo. ¿Quién nos condenará? ¡NADIE! ¿Porqué? ¿Porque somos muy buenos y santos? ¿Por qué somos aventados espiritualmente? No. sino porque CRISTO INTERCEDE POR NOSOTROS. Esta fue una de las más gloriosas verdades evangélicas que descubrí.   El apóstol Juan lo explica:
    (20)
    “Mis queridos hijos, les escribo estas cosas, para que no pequen; pero si alguno peca, tenemos un abogado que defiende nuestro caso ante el Padre. Es Jesucristo, el que es verdaderamente justo. Él mismo es el sacrificio que pagó por nuestros pecados…” –1 de Juan 2:1-2.

Si eres un sincero seguidor de Cristo tienes que admitir que todavía luchas con costumbres y actitudes pecaminosas en tu vida. Sin duda Ya no cometes pecados como antes, pero todavía pecas. Y la razón que no pierdes tu salvación es porque tienes a Jesús como abogado que defiende tu caso ante el Padre, Jesucristo. Y la Palabra de Dios dice lo que debemos hacer cuando reconocemos que hemos pecado:  “…si confesamos nuestros pecados –¿a quién?—a Dios, él es fiel (es decir, es confiable, puedes depender en Él) y justo para perdonarnos nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad” (1 Juan 1:9). Tú simplemente confiesa. Cristo se encarga de defenderte!

Ahora, no estoy seguro de lo que Jesucristo hombre dice al Padre para defenderme. Antes yo me imaginaba que Cristo decía algo como, “Padre…sabemos que esta no es la primera vez que Juan a cometido el pecado que acaba de cometer. Y que repetidamente te ha rogado que les des “otra chansa”. Padre, te ruego que le pases quebrada… ¡tenle misericordia!”

No estoy seguro de lo que Cristo realmente le dice al Padre en mi defensa, pero de esto estoy seguro, Él NO PIDE AL PADRE POR MISERICORDIA SINO (como todo buen abogado) Él pide QUE SE HAGA JUSTICIA!  Recuerda lo que la Biblia dice en 1 Juan 1:9; “…Dios es JUSTO…para perdonar”.  En otras palabras, Cristo dice algo semejante a esto: “Padre, Yo he cumplido las justas demandas de Tu ley a su favor, y he pagado por TODOS los pecado de Juan. Así que,  sería una injusticia que Tu demandes que Juan pague otra vez por lo que yo ya he pagado mediante mi sacrificio en la cruz. Padre, ¡concluyo mi alegato! ¡El caso de Juan es cerrado y sellado!” LA intercesión del Cristo viviente garantiza nuestra salvación…nos mantiene salvos.

Por último,
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5. El Cristo resucitado PROVEE EL MODELO
PARA UN FUTURO GLORIOSO
para nosotros y para el mundo entero.

Los profetas del Antiguo Testamento predijeron que el Mesías vendría como “el Siervo que sufriría—como un “Cordero” que sería sacrificado por los pecados de toda la humanidad, resucitaría de la muerte y ascendería al cielo (Isaías 53 nos da la descripción más vívida de los sufrimientos y la muerte de Cristo).

Pero los mismos profetas también predijeron que el Mesías vendría al mundo otra vez con gloria y poder para resucitar y reunir a Su pueblo y establecer un reino de paz y justicia perpetua.

Isaías 9:6-10 (RVC):
6Porque un niño nos ha nacido, ¡un hijo nos ha sido concedido! Sobre sus hombros llevará el principado, y su nombre será «Consejero admirable», «Dios fuerte», «Padre Eterno» y «Príncipe de paz». 7La extensión de su imperio y la paz en él no tendrán límite. Reinará sobre el trono de David y sobre su reino…desde ahora y para siempre”.

El ángel Gabriel le dijo a la virgen María que el niño que iba a dar a luz, 32…lo llamarán Hijo del Altísimo. Dios…le dará el trono de David, su padre, 33 y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin” (Lucas 1:32-33).

Estas profecías todavía no se han cumplido.  Estas profecías se refieren a un reino literal que Jesucristo establecerá cuando regrese gloriosamente al planeta tierra. La Biblia está repleta de profecías de que el Mesías vendrá otra vez al mundo para establecer su Reino eterno sobre la tierra. Uno de cada 30 versículos en el NT hacen referencia al regreso de Jesucristo al planeta tierra. Cristo dijo a sus discípulos la noche antes de su crucifixión:

(22)
Juan 14:1-3:
«No se turbe su corazón. Ustedes creen en Dios; crean también en mí… Y si me voy y les preparo lugar, vendré otra vez, y los llevaré conmigo, para que donde yo esté, también ustedes estén.
Cuarenta días después de haber resucitado, Cristo fue levantado al cielo en presencia de sus discípulos. Mientras ellos veían a Cristo ascender al cielo,  dos ángeles aparecieron y dijeron:
(23)
Hechos 1:11(NTV):
«Hombres de Galilea… ¿por qué están aquí parados, mirando al cielo? Jesús fue tomado de entre ustedes y llevado al cielo, ¡pero un día volverá del cielo de la misma manera en que lo vieron irse!».

La Biblia claramente enseña que su regreso será corporal, físico y visible.
(24)
Hay tantas Escrituras que hablan de la segunda venida de Cristo y nuestra reunión con Él, que lo hallé difícil decidir cuál escoger:  Pensé de Filipenses 3:20-21 (NTV):
20…nosotros somos ciudadanos del cielo, donde vive el Señor Jesucristo; y esperamos con mucho anhelo que él regrese como nuestro Salvador. 21 Él tomará nuestro débil cuerpo mortal y lo transformará en un cuerpo glorioso, igual al de él.

Así que, ¿QUÉ SIGNIFICA LA RESURRECCIÓN DE CRISTO PARA NOSOTROS HOY?

(1). La esperanza de la SALVACIÓN PERSONAL mediante llegar a conocer al Cristo viviente.
(2) que podemos gozar de PRESENCIA DEL CRISTO VIVIENTE NOS PODER,  para enfrentar las dificultades de la vida.
(3) significa que pertenecemos a una iglesia indestructible porque está fundada sobre EL CRISTO VIVIENTE Y ETERNO.
(
4) LA INTERCESIÓN DEL CRISTO VIVIENTE garantiza la permanecia nuestra salvación…y finalmente—y hay más--
5. El Cristo resucitado PROVEE EL MODELO PARA UN FUTURO GLORIOSO
para nosotros y para el mundo entero.

Así que,

(25)
COMO DEBO RESPONDER A ESTAS GLORIOSAS VERDADES
1 Corintios 15:55-58 (NTV):

(26)
Enfrento la muerte con confianza cantando.
55 Oh muerte, ¿dónde está tu victoria?   Oh muerte, ¿dónde está tu aguijón?».
(27)
Mantengo una actitud de victoria
57 ¡Pero gracias a Dios! Él nos da la victoria sobre el pecado y la muerte por medio de nuestro Señor Jesucristo.
(28)
Me esfuerzo a Crecer en fe y en ser como Cristo
58 Por lo tanto, mis amados hermanos, permanezcan fuertes y constantes. Trabajen siempre para el Señor con entusiasmo, porque ustedes saben que nada de lo que hacen para el Señor es inútil.

Y si todavía no has invitado a Cristo a tomar control de tu vida…Cristo te invita
(29)
 »¡Mira! Yo estoy a la puerta y llamo. Si oyes mi voz y abres la puerta, yo entraré y cenaremos juntos como amigos” (Apocalipsis 3:20 NTV). Esta es una metáfora de tu corazón o de tu voluntad. Es decir, TU TIENES QUE ABRIR TU VIDA A JESUCRISTO.

OREMOS.